El hotel Le Méridien ofrece Au Soleil, un programa con actividades durante los meses de septiembre y octubre para decirle adiós a la temporada estival. Nos adentramos en Le Méridien Barcelona para conocer las últimas experiencias.
Con septiembre ya muy avanzado, nos despedimos del verano y le damos la bienvenida al otoño, pero aun así, el hotel Le Méridien Barcelona, presenta Au Solei: experiencias veraniegas en el centro de la Ciudad Condal. Un programa exclusivo que se une a la nueva instalación de arte floral de Donna Stain, la gastronomía del recién reformado restaurante CentOnze o la «passegiata» para conocer una nueva perspectiva de un trozo de Barcelona, un paseo cultural desde el hotel descubriendo anécdotas del distrito.
Entrada al restaurante CentOnze, con la escultura de Jaume Amigó ‘Gaudí Soupe’
Acompañando la entrada del reformado restaurante, Le Méridien Barcelona cuenta con una obra del artista Jame Amigó. Una escultura de 25 metros de longitud y compuesta por 141 platos de hierro forrados de papel, que homenajea a Gaudí. La creación está inspirada en las maquetas arquitectónicas que realizaba el arquitecto catalán, y es un ejemplo de cómo Le Méridien está vinculado con el arte contemporáneo.
Productos de temporada
El restaurante, con vistas a las emblemáticas Ramblas, ofrece el mercado a la mesa, centrando sus platos en ingredientes naturales. Para esta ocasión, CentOnze ofrece un menú degustación con productos locales y de temporada. Además, cuentan con el vino rosado esencial del programa Au Soleil, así como su cóctel y el Petit Plat «summer state of mind». De la misma manera, el Signature Cocktail Bar, complementa las comidas, disfrutando de cócteles y tapas de autor. El bar cuenta con un aire moderno y vintage, donde mezclan música y las mejores creaciones cocteleras como Flamingo y Mojito de frambuesa, o cócteles de autor como Coco Loco y Kentucky Splash.
De izq. a drch.: Ensalada de aguacate a la parrilla con mango y frutos secos, y Presa Ibérica
Txipirón relleno con bisque de mariscos
Retomando el menú degustación, está compuesto de platos variados, como chupitos de salmorejo de remolacha o ensalada de aguacate a la parrilla con mango y frutos secos. También podemos elegir huevo frito ecológico con salsa de foie con vino Oporto y trufa fresca, y txipirón relleno con bisque de mariscos. De segundos se puede elegir entre presa ibérica o bacalao, y de postre, el chef recomienda su plato piña a la vainilla, coco, mango, manzana verde y helado de yogurt.
Piña a la vainilla, coco, mango, manzana verde y helado de yogurt
Arte y la ‘passegiata’ la última experiencia a pie
Como hemos dicho, Au Soleil también presenta una instalación de arte floral creada por la diseñadora australiana Donna Stain. La artista, afincada en España, presenta su arte a través de las flores, siendo elemental en sus decoraciones. A lo largo de su carrera ha trabajado en Londres, junto a la florista Jane Packer, o Nueva York, donde abrió una tienda y una escuela de arte.
Arte Floral de la artista Dona Stain en el restaurante CentOnze
Además, el hotel apuesta por el arte cuenta con un nuevo mosaico de fotografías creado por Joan Fontcuberta. Su obra está compuesta por miles de pequeñas imágenes capturadas en Internet, y se contempla de dos maneras. Por un lado, de lejos, que las pequeñas fotografías componen el diseño en conjunto del artista, y por otro lado, de cerca, donde podemos observar las imágenes que lo componen una a una.
Foto-mosaico compuesto por miles de imagenes pequeñas capturadas en internet de Joan Fontcuberta situado en la entrada del hotel
Desde el propio hotel están muy concienciados en ofrecer a los visitantes las mejores experiencias, sumergirlos en actividades y compartir con ellos su historia. De esta manera, los clientes alojados, hasta el mes de noviembre, pueden disfrutar de la actividad de la «passegiata». Recorrer y descubrir a pie rincones de Barcelona que quizá no son muy conocidos, restaurantes nuevos o antiguos, historia y curiosidades. A pesar de la entrada de otoño, las temperaturas en nuestra ciudad suelen ser cálidas, y octubre siempre se puede aprovechar para dar pequeños y agradables paseos.
Dirección: La Rambla 111, Carrer del Pintor Fortuny, 4-6, Barcelona