El Mercer Restaurante es toda una sorpresa. No solo por su singular ubicación en el barrio Gótico de Barcelona o por la arquitectura de sus muros milenarios, sorprende también por la cocina que ofrece su chef Harry Wieding, que propone platos sencillos, como mejillones a la brasa, butifarra ahumada de pollo o huevo con jamón y setas. El secreto de Wieding consiste en enaltecer los ingredientes, elevar la salchicha, la alcachofa o un higo, para ponerlos a la altura de las cinco estrellas del emblemático Hotel Boutique Mercer 5* GL. Por eso, en su propuesta el chef no pierde de vista dos cualidades esenciales, que para él son la calidad de los productos y su proximidad
“La experiencia gastronómica que propongo se basa en descubrir y degustar platos elaborados con ingredientes de máxima calidad y tratados de la mejor manera posible”, explica Wieding para Magazine Horse. El chef huye de los artificios y construye platos minimalistas en base a tres o cuatro ingredientes. De hecho sus platos más exitosos en el Mercer Restaurante son los elaborados a la brasa y los ahumados, una muestra más de la sobriedad en su gastronomía.
Este plato de Caviar de trucha obtuvo 10 puntos sobre 10 por evaluación de la Academia Catalana de Gastronomía.
Para Wieding, la cocina de proximidad es transcendental –la gamba del mediterráneo, els bolets de la Costa Brava- ya que garantiza la frescura del producto y contribuye a mantener una salud equilibrada. “Lo que genera la naturaleza es aquello que el cuerpo necesita en cada momento del año, como los tomates en agosto o los guisantes en marzo”, dice, o las setas que ahora ofrece en uno de sus platos (Huevo – yema braseada, jamón, setas). Otras de sus invitaciones son el Caviar de trucha a la brasa con espuma de patata e hinojo; la ensalada de foie y pollo en escabeche; las Morcillas de mar, con raya, sepia, cebolla o sidra; o, en los postres, un Soufflé de avellana y vainilla; o un Sorbete de ciruela a la brasa. Piezas de gran calidad cocinadas con delicadeza y pasión.
Harry Wieding –Premio Cocinero Joven del Año 2013 y ganador de dos soles Repsol- llegó el verano pasado al Mercer Restaurante, y desde entonces, junto al subchef Marc Ramos, se encarga presentar su propuesta en dos menús degustación (Mercer, de 60€, y Festival, de 90€), acompañados de una carta de vinos con 170 referencias procedentes de las principales regiones productoras del mundo, con especial hincapié en las españolas y catalanas.
El resultado es una invitación refinada y artística, donde las creaciones de Wieding reflejan la influencia de sus primeros maestros –“mi madre, mi abuela y mi abuelo”- y de otros grandes cocineros que marcaron su trayectoria.
“¿La cocina es arte?”, preguntamos en Magazine Horse. Y el chef nos contesta: “Totalmente. He comido muchas obras de arte de grandes artistas llamados chefs, cocineros, padres, madres, abuelos…”.
Mercer Restaurante: un entorno privilegiado
Y si el paladar es un agasajado especial en el Mercer Restaurante, la vista es también protagonista en esta experiencia gastronómica que invita a todos los sentidos a disfrutar. La sala para los comensales cuenta con la presencia de la muralla romana de Barcelona (del siglo I) y de la torre de defensa 28 con frescos originales del siglo XII. El entorno se ha complementado con líneas puras y colores claros que ensalzan la piedra de los muros.
Además del restaurante, Le Bouchon gastrobar ofrece una opción más informal. Con tapas tradicionales o más originales pero siempre basadas en productos locales en ese juego entre lo nuevo y lo antiguo que parece caracterizar cada aspecto del Mercer.
Un Cocktail bar, el servicio de bar de la terraza o los suculentos desayunos que se ofrecen en el restaurante complementan la variada su oferta gastronómica. Un hotel para disfrutar del lujo, para dejarse mimar y para rodearse de belleza e historia durante unos días.
Arquitectura milenaria
Uno de los aspectos de más valor en el Hotel Mercer es sin duda la historia que encierran sus paredes: La piedra es el material estrella de unos muros que recogen la vida arquitectónica de Barcelona, acumulando estilos del siglo I al XIX. La muralla romana de Barcino, del siglo I, forma parte de este singular edificio en el que las peculiaridades pueden apreciarse en cada uno de sus rincones. Las veintiocho habitaciones del hotel conservan la altura de sus techos y las vigas de madera originales.
El arquitecto Rafael Moneo, premio Príncipe de Asturias de Bellas Artes 2012, dedicó cuatro años a la restauración del Mercer. Su proyecto de rehabilitación permitió rescatar un valioso patrimonio cultural e integrarlo a la moderna arquitectura del hotel. Con un mobiliario sencillo y de diseño contemporáneo, el equipo de interiorismo de Mercer Hoteles ha conseguido un equilibrio perfecto entre la modernidad y el respeto por el pasado.
Su fachada medieval, repleta de balcones, da la bienvenida a los huéspedes a través de un gran portón de madera maciza. En su interior, tras el hall, un patio de naranjos enmarcado por columnas del siglo XVII ayuda a que la luz natural llegue al interior. Junto al patio se sitúan el Mercer Restaurant, el gastrobar Le Bouchon y el Mercer Cocktail Bar.
Las dos torres de vigilancia de la muralla romana coronan la terraza del hotel, con vistas a la cúpula de Santa María del Mar, la basílica de San Just i Pastor y la catedral de Barcelona. Al atardecer, esta terraza se abre exclusivamente para los huéspedes que se alojan en el Hotel y ofrece un mirador único también de los tejados de la parte más antigua del barrio gótico barcelonés.
Todo el hotel está lleno de referencias históricas. Su biblioteca, situada en la planta principal, se encuentra entre el bastión 28 y 29 de la muralla romana de la ciudad e incluye frescos medievales descubiertos durante la restauración de la estructura. Asimismo, en la recepción se halla una viga del siglo XVI con pinturas medievales. Para su rehabilitación se ha requerido la colaboración de Patrimonio de la Generalitat de Catalunya y de la Universidad de Barcelona.
La huella histórica que ofrece el Hotel Mercer en todas sus dependencias (también en el Mercer Restaurante), contribuye a construir una atmósfera especial en todos los ambientes, combinando de forma magistral la contundencia del pasado con el estilo más actual.
MERCER HOTEL BARCELONA
Dirección: Carrer dels Lledó, 7
Teléfono: 93 310 74 80
Imágenes de Jordi Blancafort y cedidas por el Hotel Mercer