Writer ARIADNA FERNÁNDEZ UJJA
160,9 millones de euros ha sido la cantidad que ha hecho que Les femmes d’Alger (Versión ‘O’) de Pablo Picasso se convierta en la pintura más cara jamás subastada. La puja tuvo lugar en la casa Christie’s en Nueva York, donde el cuadro, que ya había sigo subastado en 1997 por 32 millones, se ha revalorizado hasta superar el precio del tríptico Tres estudios de Lucian Freud, de Francis Bacon (subastado en 2014 por 142,4 millones de dólares).
Esta obra de 1955, de 114×156,4 cm, es un homenaje a la última de las mujeres de Picasso, Jacqueline Roque, una pintura cubista que reprodujo de una obra del artista francés Eugène Delacroix que reza el mismo título y que llegó a obsesionar al pintor español porque creía ver representada a Jacqueline en él. Un cuadro que, como el de Bacon, es un diálogo entre dos artistas (Picasso y Delacroix), e incluso tres, ya que se considera una respuesta a la muerte de Matisse, su amigo y rival. Esta obra perteneció a la colección Victor y Sally Ganz y ha formado parte de retrospectivas del pintor en el MoMA de Nueva York (en 1957 y 1980), en la National Gallery de Londres (en 1960) y en el Louvre de París (en 2008 y 2009).