¿Te imaginas un lugar donde puedas caminar entre acantilados con vistas al Atlántico, relajarte en playas de aguas cristalinas, saborear una gastronomía local y descubrir tradiciones auténticas?
Ese lugar existe, y se llama Setúbal. Situada en la costa de Portugal a 45 minutos de Lisboa. Esta región costera lo tiene todo, desde naturaleza salvaje, delfines en libertad, playas de ensueño, rutas gastronómicas y una autenticidad que te conquista desde el primer día.
Setúbal es una ciudad con alma marinera y tradición vitivinícola, conocida por su vino Moscatel, el queso de Azeitão y su gastronomía basada en el producto fresco del mar. Sus paisajes naturales —como la sierra de Arrábida y el estuario del Sado— o rincones como el barrio de Troino con sus calles adoquinadas , el ritmo pausado de vida y su rica herencia cultural, ofrecen una conexión auténtica con la historia y la identidad local.
Te desvelamos los 7 imprescindibles de Setúbal:
1-Observación de delfines en el estuario del río Sado
A bordo de un catamarán de 17 metros, André y su mujer Vanda, una pareja enamorada del mar y de la vida sencilla, a través de su empresa Setúbal Alive, ofrecen experiencias que van más allá del avistamiento de delfines. También incluyen comida local a bordo, momentos de paddle surf, baños en aguas ricas en fitoplancton y atardeceres con picnic y música fado.
Se definen como una compañía de turismo marítimo consciente priorizando el silencio del mar y la conexión con el entorno. No prometen avistamientos de delfines, aunque en verano la probabilidad de verlos es del 99%.
Siempre anteponen el bienestar de los animales para evitar alterar su hábitat.
El barco del año 2010, restaurado por André, funciona con energía solar, vela y tan solo gasta un consumo de 5 litros de combustible/hora. Este se mantiene gracias a la economía circular y la colaboración con la comunidad local.
Para ellos, la ecología significa dar nueva vida a un barco y hacerlo autosuficiente, sin depender de marinas ni recursos externos.
Promueven una relación ética con quienes trabajan en el proyecto, ya que todos comparten el amor por la región y el mar. Además, trabajan en un entorno donde la calidad de vida y el disfrute son esenciales. Como dice André, los delfines son la “cereza del pastel”, pero el pastel sigue siendo especial, con o sin ella. No buscan turistas, buscan cómplices del mar.
2-El azulejo setubalense: una rica tradición artística local que narra historias del legado portugués
¿Quién no ha visto las baldosas de cerámica blancas decoradas con esmalte azul?
Si tienes curiosidad para ver cómo pintan manualmente los azulejos, en el taller de Azeitâo recrean diseños antiguos, no solo de países europeos, sino también islámicos y chinos.
Artesana pintando las baldosas
Aquí podrás ver cómo producen la técnica de corda seca originaria del siglo XV árabe, diseños sin relieve donde las líneas negras se marcan con manganeso y aceite y actúan de barrera química para separar los colores. La técnica hispano árabe del siglo XVI que son los azulejos planos en relieve pintados con esmaltes de diferentes colores. Po último, la mayólica que es la técnica portuguesa que utiliza una base blanca mezclada con agua. Cuando está seco, se calca con carbón el dibujo y se pinta con diferentes óxidos como el cobalto, el hierro el cobre o manganeso. Todos pintados a mano.
Además, también hacen talleres para pintar tus propios azulejos mayólica.
Baldosas antes y después del horneado, mostrando el cambio de color que se produce tras la cocción en el horno. De izq. a dcha. Baldosas blancas y azules mayólicas, en el centro la técnica hispano árabe, dcha. técnica de corda seca del siglo XV árabe.
El color final de las baldosas se revela tras un horneado de 6 a 8 horas a 180 grados. El cobalto, inicialmente gris, se torna azul intenso. Otros colores tienen orígenes metálicos: verde (cobre), amarillo (hierro), marrón (óxido de manganeso), mientras que el blanco se mantiene como tal.
La capilla del Fuerte de São Filipe o el Mercado do Livramento son dos ejemplos de paradigma de la azulejería portuguesa en Setúbal.
3-Vinos de Setúbal: 250 cepas nativas un destino enoturístico top en Europa
El clima y la geografía de Setúbal, con la sierra de Arrábida es ideal para blancos y caldos como el moscatel mientras que las zonas más planas para tintos, han favorecido una producción continua desde la época de fenicios y griegos.
La región de Azeitão alberga una rica variedad de vinos locales, desde el tradicional moscatel hasta deliciosos blancos y tintos. Destacamos la bodega José Maria da Fonseca, una de las más antiguas de Portugal, con más de 200 años de historia. Creó la primera bodega en embotellar vino de mesa en Portugal y Periquita es su marca de vino más conocido.
El Moscatel ‘Torna-Viagem’ que significa ‘viaje de vuelta’ en Portugués, ha sido premiado internacionalmente y es considerado un moscatell de colección, raro y muy valorado por enólogos y amantes del vino.
Su fama hace referencia a una antigua práctica del siglo XVIII y XIX, cuando los vinos eran enviados en barco desde Portugal hasta las colonias (Brasil, India, África…) y cuando regresaban, se dieron cuenta que envejecía de forma diferente debido al movimiento constante del barco, los cambios de temperatura y la humedad marina. El vino ganaba cuerpo, complejidad y suavidad, desarrollando aromas más intensos y un sabor más redondo y duradero.
Se dieron cuenta que la travesía mejoraba su calidad.
Actualmente Torna Viagem han sido realizadas principalmente con fines de investigación y no están previstas para su comercialización en las próximas décadas. La decisión de vender este moscatell será de la novena generación, que, todavía no ha nacido.
Se puede visitar la Casa-Museo a través de una ruta guiada y sus bodegas históricas, la Bodega da Mata y la Bodega dos Teares Novos, donde envejece el vino Periquita entre otros y la Bodega dos Teares Velhos que aquí es donde reposan los caldos de moscateles más antiguos de Setúbal entre cantos gregorianos.
Al fondo se encuentra ‘bodega de frasqueira’ (el cementerio) con la colección privada de la familia con autenticas reliquias algunos de los cuales tienen más de 100 años: es la catedral del vino.
Al final de la ruta, se pueden degustar algunos de los vinos elaborados por José Maria da Fontseca.
4- Los mejores restaurantes recomendados por los setubalentes amantes de la buena gastronomía.
Setúbal es famoso por el pescado, Sesimbra por el marisco, el norte de Portugal por la carne de ternera, en el sur de Portugal, por la carne de cerdo.
Esta es una selección de 5 restaurantes recomendados por setubalenses que destacan por su calidad, gastronomía local y el uso de productos de proximidad.
Xtoria fusiona la cocina tradicional portuguesa con técnicas contemporáneas. Dirigido por la chef Rita Neto, ganadora del primer MasterChef Portugal, ha sido reconocido con el distintivo Bib Gourmand de la Guía Michelin. Su carta creativa incluye platos como choco frito con ponzu, patata negra y caviar de lumpo, lomo de ternera con sabayón de atún, setas Eringy al vino de Oporto y postres exóticos como la crema de cardamomo con chutney de mango.
La decoración refleja la modernidad y la tradición de la región. Xtoria se ha consolidado como un referente gastronómico en la ciudad, destacando por su calidad, innovación y excelente relación calidad-precio.
O Farol es un restaurante con vistas panorámicas junto al mar y está situado en pleno corazón de la Serra da Arrábida.
Sus platos estrella son pescado fresco del día a la parrilla, como dorada y lubina, acompañado de guarniciones tradicionales con una cuidada selección de vinos que marida a la perfección con cada plato. Una experiencia de cocina setubalense auténtica por la excelencia del producto local.
Barriga de Freira, imagínate cenar en un espacio que una vez resonó con los cánticos y el silencio de las mojas. Ubicado en la antigua cantina del Convento de Jesús en Setúbal que data del siglo XV, este restaurante ofrece una selección de entrantes, ensaladas, carnes maduradas, pescado y postres artesanales. Hace un guiño a la história del convento aunque reinterpretada con una visión contemporánea.
Restaurante Barriga de Fraire en el Convento de Jesús
Armazém do Peixe su propietario Rodrigo Crespo es un antiguo pescador y su restaurante es una extensión de la herencia marítima de su familia. Ubicado en un antiguo almacén de redes, convirtiéndolo en un espacio amplio, luminoso y con terraza junto al río y al puerto pesquero.
Su cocina es un referente para aquellos que buscan una experiencia gastronómica de primer nivel, especialmente con pescados y mariscos frescos.
A Casa do António aunque la entrada no llama mucho la atención, al entrar te sorprende con un ambiente acogedor, decoración tradicional y una terraza ideal para almorzar o cenar. Su especialidad son las espetadas de marisco, mariscos a la brasa, calamares fritos y platos de pescado fresco. Está todo preparado al estilo casero, con la intención de que te sientas como comiendo en casa. Es un lugar con un ambiente cálido, familiar y muy tradicional.
Wine Corner by José Maria Da Fonseca es el restaurante insignia de la marca, un wine bar con una propuesta gastronómica sencilla pero de gran calidad, pensada para maridar con sus vinos. Su cocina pone en valor los productos locales, destacando tablas de quesos regionales y platos como gambas al ajo con licor de Moscatel, bacalao a Brás, choco frito o carrillera de ternera.
El espacio destaca por sus bóvedas repletas de botellas de vino, un patio interior ideal para disfrutar al aire libre y del restaurante.
Su propuesta culinaria rinde homenaje a la tradición culinaria de la región.
5- Un paseo por el vibrante Mercado de Livramento
Es el epicentro de todas las mañanas de lunes a sábado de 7 a 14h, el paraíso del pescado, de la fruta y verdura, de las conservas, hierbas aromáticas y productos regionales como la miel, varios tipos de pan, quesos y artesanía local.
Los paneles de azulejos, que datan de principios del siglo XX, representan escenas de la vida local y las actividades económicas de la región, como la pesca, la agricultura y la vida en el mercado, ofreciendo una valiosa perspectiva histórica y cultural de Setúbal en esa época.
Si eres amante de las ostras, estás en el sitio perfecto. En este mercado hay de todos los tamaños y si tienes curiosidad, te explican el porqué de su color verdoso, su crecimiento o porque están unas más pulidas que las otras.
Iza. puesto de ostras de diferentes tamaños. Dcha. puesto de quesos locales.
6-Hotel Casa Palmela, el lujo sostenible en la Arrábida
El Hotel Casa Palmela, ubicado en pleno Parque Natural de Arrábida, es una casa señorial del siglo XVII que ha pertenecido a la misma familia desde 1826. Restaurada con respeto a su valor patrimonial, la finca conserva su esencia histórica y natural. Aunque originalmente concebido como hotel solo para adultos, hoy acoge también a familias, manteniendo un ambiente tranquilo en sus 70 hectáreas de naturaleza.
Con un fuerte compromiso con la sostenibilidad, el hotel integra energías limpias, como paneles solares, sistemas de desalinización y piscinas tratadas con sal. Con el concepto farm to table tienen un huerto ecológico que producen hortalizas, té, orégano, miel, mermeladas, galletas, lavanda entre otros para el restaurante Zimbral. Su gastronomía es local con ingredientes frescos y de temporada. Contratan personal de la zona y colaboran con asociaciones sociales.
Casa Palmela demuestra que el lujo puede ser respetuoso con el medio ambiente. Combinan hospitalidad, historia y conciencia ecológica para ofrecer una experiencia única y responsable.
Restaurante Zimbral del hotel Casa Palmela.
A través del proyecto Once Upon a Day, Casa Palmela ofrece experiencias tailor-made que incluyen desde senderismo por la sierra de Arrábida (Setúbal, Sesimbra y Palmela) y actividades locales como la elaboración de queso, pan o pintura de azulejos, hasta propuestas gastronómicas, de aventura, avistamiento de delfines, fauna y flora, escalada, trekking, buceo, paddle surf y coastering.
Además, organizan cuatro retiros anuales centrados en el bienestar, dos de ellos con programas de yoga holístico de Ananda in the Himalayas y yoga combinado con pintura. La propiedad también se alquila para retiros de mindfulness y bienestar organizados por otras empresas.
Los viñedos de la finca están arrendados a José María da Fonseca, reconocido productor de moscatel y sirah. La finca vecina, también de su propiedad, es conocida por el cultivo del moscatel morado, una variedad rescatada por Fernando Soares Franco, antiguo propietario.
Desde el hotel Casa Palmela, invitan a sus huéspedes, y otros visitantes, a explorar conscientemente la región y experimentar verdaderamente la experiencia de los habitantes locales. Así contribuyen indudablemente a la economía de la región de forma sostenible.
7-Parque Nacional de Arrábida, deporte y naturaleza en un entorno único.
Aquí no sabes si mirar hacia las montañas o hacia el océano, pero si quieres caminar hay más de 40 km de senderos donde tienes garantizadas unas vistas panorámicas increíbles.
En el Parque Natural de Arrábida hay playas como la Galapinhos de agua turquesa , ideal para nadar y hacer snorkel. La Praia do Creiro en Portinho da Arrábida, que, para los interesados en la historia, cerca se encuentra la Estación Arqueológica do Creiro, con restos de antiguas fabricas romanas de salazón de pescado(S/ I-V d.C).
A lo largo de la carretera principal que atraviesa el Parque Natural de Arrábida y en sus puntos más altos se encuentran varios miradores con vistas impresionantes del paisaje.
El coastering es ideal para quien le gusta el senderismo, la natación y un poco de escalada suave. Esta actividad, te permite interactuar con el terreno costero a pie y nadando, superando obstáculos naturales como rocas, cuevas marinas y las olas del mar. Hay diferentes empresas que ofrecen esta experiencia ya que se recomienda ir con guías experimentados que conocen la zona y las medidas de seguridad necesarias.
Volar en parapente, el paddle surf, paseos en kayak, ciclismo y visitar la cueva Lapa de Santa Margarida son otras actividades para disfrutar de la naturaleza.
Otra experiencia única es Arrábida Walks & Crafts hacer senderismo con un pastor de cabras con picnic de productos regionales.
António, conocido como Nix, nacido en Azeitão, es pastor de cabras y se conoce todos los senderos del parque natural de Arrábida. Es un excelente narrador de historias locales y comparte su conocimiento de la botánica y fauna de la región. Al final de la caminata que dura entre 2 y 3 horas, ofrece un picnic con productos de la región.
Telma es pintora y ofrece talleres que conectan a los participantes con la naturaleza. Ambos comparten su pasión por la región mediante paseos y talleres de arte, sus paisajes y la cultura local.
Su pasión es promover la región mediante paseos y talleres de arte , destacando sus aspectos naturales, culturales e históricos.
